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Title: The Japanese Teahouse

Author: Wolfgang Fehrer

Edited by: niggli

2020. ISBN: 978-3-7212-0997-6

Language: English 

232 pages

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“When I walked through the area with my eyes, the color of the lemon, which integrated without drawing attention the harmony of the contrasting colors, stood out with extreme purity. I had the impression that the dusty atmosphere of Maruzen was strangely tensed around my lemon. I stood there for a moment contemplating it. Suddenly something else occurred to me. A strange idea that disturbed me: the idea of leaving the lemon there as if nothing had happened. I felt especially encouraged by this thought.

“Cuando recorrí el conjunto con la mirada, el color del limón, que integraba sin llamar la atención la armonía de los contrastados colores, se destacaba con extrema pureza. Tuve la impresión de que la atmósfera polvorienta de Maruzen se tensaba extrañamente alrededor de mi limón. Me quedé un momento contemplándolo. De pronto se me ocurrió otra cosa. Un idea extraña que me inquietó: la de dejar el limón allí e irme como si nada hubiese sucedido. Me sentí especialmente animado por esta ocurrencia.”

Kajii Motojiro, El Limón.

“The tea room sukiya wants to be nothing more than a simple cottage, a Straw hut, as we call ir. The original characters for sukiya mean place of fantasy. Later, the various tea masters used various other signs that corresponded to their concept of the tea room, and sukiya can mean place of emptiness or place of asymmetry. It is a place of fantasy insofar as it is built to be a temporary home of poetic emotion. It is a place of emptiness inasmuch as it is without adornment, except for the few things needed to satisfy an instantaneous esthetic need. It is a place of the asymmetrical in that it is dedicated to the worship of the imperfect, leaving with intent something imperfect in order to be completed in the play of imagination”.

“El salón de té Sukiya no quiere ser más que una simple casa de campo, una choza de paja, como la llamamos. Los personajes originales de Sukiya significan un lugar de fantasía. Más tarde, los distintos maestros del té utilizaron otros signos que correspondían a su concepto del salón de té, y sukiya puede significar lugar de vacío o lugar de asimetría. Es un lugar de fantasía en la medida en que está construido para ser un hogar temporal de emoción poética. Es un lugar de vacío en la medida en que no tiene adornos, excepto las pocas cosas necesarias para satisfacer una necesidad estética instantánea. Es un lugar de lo asimétrico en la medida en que se dedica al culto de lo imperfecto, dejando con la intención algo imperfecto para ser completado en el juego de la imaginación”.

From The Book of Tea, page 7

Like the shiny lemon of Kajii deposited on a pile of old books, Japanese architecture has always aroused a strange fascination for architects of any era or geographical origin. Even in more or less successful journeys through the always unstable terrain of arbitrary formal escapism, a phenomenon quite common in recent decades, Japanese architecture has maintained a link with the inherited tradition that is not common in other cultures. Fundamental spatial, constructive or conceptual characteristics such as the division between structure and partition or enclosure, an honest treatment of materials however humble they may be, a fluid relationship with the landscape and the immediate surroundings, or the flexibility provided by an organic architecture capable of growing or reconfiguring itself according to its own inherent patterns have been objectives pursued by modern doctrine ever since it began to crystallize. These previously mentioned, and an innumerable list of architectural and perceptive qualities, have constituted from the beginning the basis of Japanese popular architecture. It is not surprising then the strong fascination aroused in famous figures such as Bruno Taut or Frank Lloyd Wright, who did not hesitate to incorporate into their praxis the lessons learned in intense physical and intellectual journeys to Japan.

Al igual que el brillante limón de Kajii depositado sobre una pila de vetustos libros, la arquitectura japonesa ha despertado siempre una extraña fascinación a arquitectos de cualquier época u origen geográfico. Incluso en viajes más o menos exitosos por los siempre inestables terrenos del escapismo formal arbitrario, fenómeno bastante común en las últimas décadas, la arquitectura japonesa ha mantenido un nexo de unión con la tradición heredada nada habitual en otras culturas. Características espaciales, constructivas o conceptuales fundamentales como son la división entre estructura y partición o cerramiento, un tratamiento honesto de los materiales por muy humildes que sean, una relación fluida con el paisaje y el entorno más inmediato, o la flexibilidad que proporciona una arquitectura orgánica capaz de crecer o reconfigurarse siguiendo sus propios patrones inherentes han sido objetivos perseguidos por la doctrina moderna desde que ésta empezara a cristalizarse. Éstas anteriormente citadas, y una innumerable lista de cualidades arquitectónicas y perceptivas, han constituido desde los inicios la base de la arquitectura popular japonesa. No es de extrañar así la fuerte fascinación que despertó en celebres figuras como Bruno Taut o Frank LLoyd Wright, que no dudaron en incorporar a su praxis las lecciones aprendidas en intensos viajes, físicos e intelectuales, a Japón.

“Pine pillars, bamboo joists, left as they are, curved and straight, square and round, up and down, left and right, new and old, light and heavy, long and short, broad and narrow, repaired where chipped, patched where torn. Everything at odds, nothing matching.”

“Pilares de pino, vigas de bambú, a la izquierda como están, curvados y rectos, cuadrados y redondos, arriba y abajo, izquierda y derecha, nuevos y viejos, ligeros y pesados, largos y cortos, anchos y estrechos, reparados donde se han astillado, remendados donde se han desgarrado. Todo en desacuerdo, nada coincidiendo”.

Zen Chan Roku, page 81

“The Japanese Teahouse” by Wolfgang Fehrer edited by Niggli shines with the vitality of a lemon just picked from its branch. Its strength, however, is not limited to a surprising first contact. It is prolonged like the juice squeezed from this ripe fruit. Throughout more than 200 pages, the author will guide us on an unprecedented journey through centuries of cultural and material evolution in the distant and dreamlike lands of the Orient. It is inevitable, even before we have begun to dissect this book, that enthusiasm will filter through our words excitedly. Have no doubt. This is a book of capital importance, perhaps one of the most important works published in recent years.

“The Japanese Teahouse”, obra de Wolfgang Fehrer editada por Niggli reluce con la vitalidad de un limón recién tomado de su rama. Su fuerza, sin embargo, no se limita a un primer contacto sorprendente. Se prolonga como el jugo exprimido de esta fruta madura. A lo largo de más de 200 páginas, el autor nos guiará en un viaje sin precedentes por siglos de evolución cultural y material por las lejanas y oníricas tierras de oriente. Es inevitable, incluso antes de haber comenzado a diseccionar este libro, que el entusiasmo se filtre por nuestras palabras excitadamente. No tengan ninguna duda. Nos encontramos ante un libro de una importancia capital, seguramente una de las obras más importantes que se hayan publicado en los últimos años.

The title of the book, “The Japanese Teahouse”, shows us without rhetoric the essential theme around which this journey is structured. That is, the Japanese tea ceremony and the transcendence it presents in architectural terms. As enthusiasts of Japanese culture, and particularly of its architectural culture, we have previously enjoyed well-known works centered on one of these themes. On the one hand, the Japanese tea ceremony has spread since the late nineteenth century with some success (“The Book of Tea” will surely be the best known) beyond the Japanese island. On the other hand, popular Japanese architecture has been explained and spread through countless books, some as important as the one written during his stay in Japan by the already mentioned architect Bruno Taut (the essential “The Japanese House and Life”). The main novelty presented by “The Japanese Teahouse” will be to explain the Japanese architectural culture in a transversal way from the evolution of the tea ceremony or, if you prefer, to illustrate this evolution from an architectural approach.

El título del libro, “The Japanese Teahouse”, nos muestra sin retórica la temática esencial en torno a la cual se estructura este viaje. Esto es, la ceremonia del té japonés y la trascendencia que ésta presenta en términos arquitectónicos. Aficionados como somos a la cultura japonesa y, particularmente, a su cultura arquitectónica, hemos podido disfrutar previamente de obras por todos de sobra conocidas centradas en alguno de estos temas. Por un lado, la ceremonia del té japonés se ha difundido desde finales de siglo XIX con cierto éxito (“El Libro del Té será seguramente el más conocido) más allá de la isla nipona. Por otro lado, la arquitectura popular japonesa ha sido explicada y divulgada a través de innumerables libros, algunos tan importantes como el que escribió durante su estancia en Japón el ya citado arquitecto Bruno Taut (el imprescindible “La Casa y la Vida Japonesas”) . La novedad principal que presenta “The Japanese Teahouse” será la de explicar la cultura arquitectónica japonesa de manera transversal a partir de la evolución de la ceremonia del té o, si se prefiere, de ilustrar dicha evolución desde una aproximación arquitectónica.

The approach, from the start, seems exciting. However, a first question arises before we start reading of the book: will it be necessary to have some previous knowledge of Japanese architectural culture? Will the subject of the book not be too specific for someone who is a clueless? The answers are soon to be found, almost from the first page, and joyfully dispel our initial fears. The main virtue of this work written by Wolfgang Fehrer is its didactic capacity. Already accustomed to the floral play on words and concepts that abound in architectural essays, as we have already commented on on another occasion, we joyfully enjoy when we find concreteness, cleanliness and precision in the exposition of arguments. Let us celebrate and recognize those who show the complex with simplicity. As is amply demonstrated in “The Japanese Teahouse”, author Wolfgang Fehrer possesses an enviable narrative and argumentative capacity. Thus, we will find a very progressive exposition of arguments and explanations, starting with introductions to different concepts or cultural frameworks that are the basis of Japanese tradition, to later develop more specific aspects on the central theme of the book, which is none other than the typological evolution of the Japanese teahouse in accordance with the social and cultural evolution of the country.

El planteamiento, de partida, parece emocionante. No obstante, una primera duda se levanta ante nosotros antes de abordar la lectura del libro. ¿Será necesario poseer unos mínimos conocimientos previos sobre cultura arquitectónica japonesa? ¿No será el tema del libro excesivamente específico para alguien lego en la materia? Las respuestas se encuentran pronto, casi desde la primera página, y disipan con alegría nuestros temores iniciales. La principal virtud de esta obra escrita por Wolfgang Fehrer es su capacidad didáctica. Acostumbrados ya a los juegos florales de palabras y conceptos que abundan en los ensayos arquitectónicos, ya lo hemos comentado en otra ocasión, no dejamos de alegrarnos al encontrar la concreción, la limpieza y la precisión en la exposición de argumentos. Celebremos y reconozcamos a aquéllos que muestran con sencillez lo complejo. Como queda sobradamente demostrado en “The Japanese Teahouse”, el autor Wolfgang Fehrer posee una envidiable capacidad narrativa y argumentativa. Así, nos encontraremos con una exposición de argumentos y explicaciones muy progresiva, comenzando desde introducciones a diferentes conceptos o marcos culturales que son base de la tradición japonesa para desarrollar después aspectos más específicos sobre el tema central del libro, que no es otro que la evolución tipológica de la casa de té japonesa en función de la evolución social y cultural del país.

“I wanted to return the tea ceremony to the ordinary people, to say to people that you do not need high-class stones or high-class columns to make a tea house but that you can do it with zinc plate. You can do it with old newspapers…I wanted to show that there is nothing cheaper to use to make a tea house…”

“Quería devolver la ceremonia del té a la gente común y corriente, para que no se necesiten piedras o columnas de alta calidad para hacer una casa de té, sino que se pueda hacer con una placa de zinc. Puedes hacerlo con periódicos viejos… quería mostrar que no hay nada más barato para hacer una casa de té…”

Kan Izue, page 213

In this way, and although the book is not explicitly structured like this, we find ourselves with two well differentiated parts. The first of these, as we have already mentioned, would serve as an introduction to the Japanese cultural and architectural environment. In it the author develops from different approaches a magnificent sketch, very accessible in form but complex in substance, of the foundations of Japanese popular architecture and, especially, of the tea house. We will thus find explanations of more general philosophical concepts that are nevertheless fundamental in the genesis of this very particular domestic space; with accurate explanations of the basic spatial concepts of this architecture, of the typological and functional elements that compose it, of the structural and constructive materialization, of its landscape considerations or its phenomenological qualities… In short, of a very complete conceptual framework that will provide us with more than enough tools to start studying and understanding the Japanese tea house, an element that, in spite of its simplicity and reduced size, condenses with an amazing strength the essence of the spatiality of the Japanese popular architecture.

De esta forma, y aunque el libro no esté explícitamente estructurado así, nos encontramos con dos partes bien diferenciadas. La primera de ellas, como ya hemos adelantado, serviría como introducción al ambiente cultural y arquitectónico japonés. En ella el autor desarrolla desde distintas aproximaciones un esbozo magnífico, muy accesible en la forma pero complejo en el fondo, de los fundamentos de la arquitectura popular japonesa y, especialmente, de la casa del té. Nos encontraremos así con explicaciones sobre conceptos filosóficos más generales que son sin embargo fundamentales en la génesis de este espacio doméstico tan particular; con certeras explicaciones sobre los conceptos espaciales básicos de esta arquitectura, de los elementos tipológicos y funcionales que la componen, de la materialización estructural y constructiva, de sus consideraciones paisajísticas o sus cualidades fenomenológicas…En definitiva, de un completísimo marco conceptual que nos dotará de herramientas más que suficientes para iniciarnos en el estudio y comprensión de la casa de té japonesa, elemento que, a pesar de su sencillez y reducido tamaño, condensa con una fuerza asombrosa la esencia de la espacialidad de la arquitectura popular japonesa.

In this respect, it is necessary to point out another of the main virtues of “The Japanese Teahouse”. Parallel to the written exposition of arguments, we are presented with a vast succession of illustrations of all kinds that perfectly depict the content of the text. The synchronization between photographs, illustrations, original drawings and numerous explanatory diagrams with the arguments presented is outstanding, which guarantees a comfortable reading and an uncommon ease of understanding and deepening.

A este respecto, es necesario señalar otra de las principales virtudes que posee “The Japanese Teahouse”. De manera paralela a la exposición escrita de argumentos, se nos presenta una vastísima sucesión de ilustraciones de todo tipo que ilustran perfectamente el contenido del texto. La sincronización entre fotografías, ilustraciones, dibujos originales y numerosos diagramas explicativos con los argumentos expuestos es sobresaliente, lo que garantiza una lectura cómoda y una facilidad de comprensión y profundización poco común.

The second part of the book (each one of them is approximately the same length) dissects with precision and depth the typological evolution of the Japanese tea house. Going back to the VIIIth Century, when this tradition passed from China to Japan and began to evolve uniquely, the author develops a journey through each of the most significant stages until reaching our days. If the first part of the book was an essential introduction to understand the typological, spatial or constructive foundations of Japanese domestic architecture, this second part delves into its evolution in a much more specific way. It is true that for those of us not familiar with Japanese history it can sometimes be a little complicated to follow the succession of dynasties, names or alterations of philosophical framework, but the virtues present in the first part continue to structure the narrative. The simplicity of the argument is accompanied by all kinds of diagrams and illustrations, which will allow the reader to enjoy this evolutionary journey in comfort.

La segunda parte del libro (cada una de ellas tiene aproximadamente la misma extensión) disecciona con precisión y profundidad la evolución tipológica de la casa de té japonesa. Remontándose al siglo octavo, momento en que esta tradición pasa desde China a Japón y empieza a evolucionar singularmente, el autor desarrolla un recorrido por cada una de las etapas más significativas hasta llegar a nuestros días. Si la primera parte del libro suponía una introducción esencial para entender los fundamentos tipológicos, espaciales o constructivos de la arquitectura doméstica japonesa, esta segunda parte profundiza en la evolución de ésta de forma mucho más específica. Es cierto que para aquellos que no estamos familiarizados con la historia japonesa puede resultar en ocasiones un poco complicado seguir la sucesión de dinastías, nombres o alteraciones de marco filosófico, pero las virtudes presentes en la primera parte continúan estructurando la narración. La sencillez argumentativa se acompaña de todo tipo de diagramas e ilustraciones, lo que permitirá al lector gozar con comodidad en este viaje evolutivo.

The edition of the book and its graphic design deserve a separate mention. We have already stated without any doubt that we are facing a major work in terms of content. The continent, moreover, is simply exceptional. The high cost of using paper, materials or colors that are far from the standard norm makes it impossible for most books to transcend more conventional configurations. Architectural publications are very expensive in themselves, making them inaccessible to most of the population, and we do not want to defend here the frivolity of making access to important content difficult by using more elitist supports. In this case, on the contrary, we must make an exception and recognize that the perfect symbiosis that has been created between channel and message is, we believe, unprecedented. The chosen binding system, the design of the book cover, the feel, color and grain of the paper on the pages, the quality of the images… everything is superb. And it is not just great because it has a brilliant design, but because it is the ideal vehicle that will transport us on this fantastic tour through the evolution of the Japanese tea house.

La edición del libro y el diseño gráfico del mismo merecen mención a aparte. Hemos afirmado ya sin género de duda que nos encontramos ante una obra mayor en cuanto al contenido. El continente, además, es sencillamente excepcional. El encarecimiento que supone utilizar papeles, materiales o colores que se alejen de lo normativo imposibilita que la mayoría de libros trasciendan de las configuraciones más convencionales. Las publicaciones de arquitectura presentan de por sí precios muy elevados que hacen que sean inaccesibles para la mayor parte de la población, y no queremos defender aquí la frivolidad que supone el dificultar el acceso a contenidos importantes por la utilización de medios más elitistas. En este caso, por el contrario, debemos hacer una excepción y reconocer que la perfecta simbiosis que se ha creado entre canal y mensaje es, creemos, inédita. El sistema de encuadernamiento escogido, el diseño de la cubierta del libro, el tacto, color y grano que presenta el papel de las páginas, la calidad de las imágenes…todo es sencillamente genial. Y no es genial sólo por poseer un diseño brillante, sino porque constituyen el vehículo ideal que nos transportará en este fantástico viaje por la evolución de la casa de té japonesa.

To sum up, regardless of who the public faced with this book, or the level of knowledge they have in relation to popular Japanese architecture, the conclusion is very clear. “The Japanese Teahouse” is an outstanding book in every aspect, with an impeccable exposition from beginning to end that provides a delight and enjoyment that more than justifies the investment on time and money that its study requires. But it is also much more. It has a very valuable pedagogical value that allows us to learn, and learn with depth and delight in a journey to inherited knowledge and wisdom. It is, without a doubt, a fundamental and essential work to approach the built and conceptual tradition of Japanese popular architecture.

Para terminar, independientemente de quién sea el público que se enfrente a la lectura de este libro, o del nivel de conocimientos que se posean en relación a la arquitectura popular japonesa, la conclusión es muy clara. “The Japanese Teahouse” es un libro sobresaliente en cada uno de sus aspectos, de exposición intachable de principio a fin que proporciona un deleite y un disfrute que justifican con creces la inversión de tiempo y dinero que su estudio requieren. Pero es además mucho más. Posee un valor pedagógico muy valioso que nos permite aprender, y aprender con profundidad y deleite en un viaje al conocimiento y sabiduría heredados. Es, sin duda, una obra fundamental e imprescindible para acercarse a la tradición construida y conceptual de la arquitectura popular japonesa.